Levántate y agradece este nuevo día. Dale una oportunidad a Dios y a la vida para renovar tu corazón, fijarte nuevas metas y propósitos y disponer todo para volver a comenzar. Dios te va a capacitar para lograr todo lo que te propongas, solo tienes que confiar en Él. «El Señor mismo irá delante de ti, y estará contigo; no te abandonará ni te desamparará; por lo tanto, no tengas miedo ni te acobardes.» (Deuteronomio 31,8) Aunque arrecie la tormenta debes saber que Dios no te va a dejar solo, que va al frente en tu batalla y que te va a ayudar a salir delante de cualquier dificultad. ¡Confía! Para Dios no hay límites. Que tengas una excelente semana.
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